viernes, 26 de febrero de 2010

Inundaciones en Andalucía

Este otoño-invierno está siendo uno de los más lluviosos de las ultimas décadas en Andalucía, registrándose precipitaciones que superan en mucho los valores medios.

Fuente: Agencia Estatal de Meteorología


De las 12 cuencas hidrográficas peninsulares *, la del Sur, en primer lugar y la del Guadalquivir, en segundo, registraron en el mes de enero de 2010 los porcentajes más altos de precipitaciones acumuladas desde septiembre de 2009 respecto a la media 1971-2000. En el mapa se representan los porcentajes de precipitación acumulada desde el 1-9-2009 hasta el 20-2-2010 sobre la normal.

Las precipitaciones del mes de enero en todo el país han tenido un valor superior al 43% del valor medio del periodo de referencia (1971-2000). Tanto en la cuenca del Guadalquivir como en la del Sur ha predominado el carácter muy húmedo, con precipitaciones del 197% y 228% respecto de la media, respectivamente.


Pm
Pe
%P
CA
PA
% PA
Cuenca del Guadalquivir
70,7
139,0
197
MH
514,5
159
Cuenca del Sur
69,4
158,1
228
MH
526,3
16
  Precipitaciones enero 2010                 Fuente: Agencia Estatal de Meteorología
 
Pm: Precipitación media 1971-2000.
Pe: Precipitación estimada del mes.
%P: % de la precipitación estimada del mes con respecto a la media 1971-2000.
CA: Carácter de la precipitación estimada del mes.
MH: Muy húmedo.
PA: Precipitación estimada acumulada desde el 1 de septiembre.
%PA: %de las precipitaciones estimadas acumuladas con respecto a la media 1971-2000.


DAÑOS POR LA LLUVIA Y LAS INUNDACIONES

 
Andalucía es una de las regiones europeas con mayor riesgo de inundaciones y la Comunidad autónoma que presenta mayor riesgo en España, seguida de la Comunidad Valenciana y Cataluña. La densidad territorial de las avenidas históricas registradas en Andalucía es un 62% mayor que la media nacional y un 12% mayor la densidad de las zonas de riesgo. Las pérdidas económicas per cápita en Andalucía son hasta un 111% superior a la nacional, lo que pone de manifiesto la vulnerabilidad de la región. El Plan de prevención de avenidas e inundaciones de la Junta de Andalucía contabiliza 1.099 puntos de riesgo de inundaciones (aunque todo parece indicar que son más), 115 de ellos de riesgo máximo, distribuidos por toda la Comunidad autónoma, siendo las provincias de Granada, Almería y Málaga, las que acumulan el mayor número. Estas tres provincias tienen grandes niveles de erosión, relieve muy abrupto, así como lluvias de gran intensidad. En las provincias de Córdoba, Jaén y Sevilla, los principales puntos de riesgo se dan en el cauce del Guadalquivir. Cádiz y Huelva son las que tienen menos zonas débiles, en Cádiz el eje del río Guadalete y la costa y en Huelva, el litoral.

Las intensas y prolongadas lluvias están causando daños en la agricultura (Asaja cifra las pérdidas en unos 1.200 millones de euros). Las pérdidas se han producido en los cultivos de invierno, el olivar de molino, los cereales, la remolacha, los cítricos, las fresas, los frutales y los productos hortícolas. La ganadería también ha sufrido daños. 

A los daños en la agricultura y la ganadería hay que sumar los producidos en la infraestructura de transporte (carreteras, vías férreas, puentes, caminos rurales y agrícolas), sanitaria (alcantarillado, estaciones depuradoras), energética (tendidos eléctricos) y en la de telecomunicaciones, así como en equipamiento urbano.

El Guadalquivir, el Genil, el Gudalhorce, el Guadalete y otros ríos, se han desbordado provocando inundaciones en cascos urbanos, barriadas, urbanizaciones y polígonos industriales, siendo las provincias de Jaén, Córdoba, Sevilla, Cádiz y Málaga, las más afectadas.
 
Que los ríos se desborden es algo totalmente natural, se podría decir que para eso están..., nuestra Comunidad no sería tan vulnerable ante este riesgo natural de existir más control urbanístico, además de una política de reforestación con especies vegetales autóctonas. Muchas de las viviendas y naves industriales afectadas por las crecidas, se han construido en zonas inundables, robándole su espacio al río. Habría que recordar el viejo dicho que sostiene que "los ríos reclaman sus escrituras periódicamente".

CAUDAL DEL GUADALQUIVIR

El caudal medio del Guadalquivir presenta los siguientes valores:
  • Embalse del Tranco (Jaen): 19,8 m3/s
  • Marmolejo (Jaen): 68,4 m3/s
  • Córdoba: 150 m3/s
  • Sevilla: 164,3 m3/s
Comparemos ahora los valores anteriores con los de febrero de 2010:
  • Marmolejo y Andújar: 2.000 m3/s.
  • Córdoba: 2.000 m3/s
  • Sevilla: entre 2.700-3.300 m3/s.
Su cadual medio anual es de unos 164 m3/s. Un módulo bajo que se explica por las reducidas dimensiones de la cuenca (57.000 Km2), pero sobre todo por las condiciones climáticas: precipitaciones anuales moderadas y elevada evaporación estival. No obstante los caudales evacuados por el Guadalquivir se caracterizan sobre todo por su fuerte irregularidad, pudiendo definirse el comportamiento hidrológico del río como espasmódico. A título comparativo hay que recordar que el Ebro, el río más caudaloso de España, posee un caudal superior a los 600 m3/s y los grandes ríos europeos se sitúan en torno a los 2.000. El Volga, el más caudaloso del continente europeo, alcanza los 8.000 m3/s.

Se consideran crecidas ordinarias del Guadalquivir los caudales situados entre 1.000 y 3.000 m3/s, por cuanto no suele entrañar ningún riesgo importante y pueden ser desaguados sin dificultad. A partir de los 3.000-4.000 m3/s el río es incapaz de evacuar el volumen de agua que transporta y se desborda inundando la vega, las marismas y los núcleos urbanos.

La crecida más fuerte del Guadalquivir en el siglo XX tuvo lugar en febrero de 1963, con un caudal de 5.300 m3/s en Córdoba y 6.700 m3/s en Sevilla, que provocó grandes riadas. El estiaje más acusado se registró en octubre de 1945, durante ocho días no circuló agua por el Guadalquivir a su paso por Sevilla.

La construcción de embalses en el curso del Guadalquivir así como en la cabecera de los afluentes principales y las obras de regulación del cauce a su paso por Sevilla realizadas a lo largo del siglo XX, han contribuido a controlar y minimizar el impacto de las crecidas.

Aquí puedes ponerte al día sobre caudales de los ríos y agua embalsada:

Y aquí accedes al SAIH (Sistema Automático de Información Hidrológica) de la cuenca del Guadalquivir.

* La Directiva marco europea 2000/60/EC introduce el concepto de demarcación hidrográfica, entendida como la zona territorial y marina comprendida por una o varias cuencas vecinas y las aguas de transición, subterráneas y costeras, asociadas a dichas cuencas. En nuestro país, el Real Decreto 125/2007 de 2 de febrero fija el ámbito territorial de las demarcaciones hidrográficas.


martes, 23 de febrero de 2010

¿Es éste el mundo que queremos?

Nuestra forma de vida basada en el sistema económico capitalista, que básicamente podemos definir como el sistema socio-económico que persigue la obtención del máximo y continuo beneficio económico para los propietarios del capital, en el menor tiempo posible, que subordina el trabajo al capital y que expulsa a la ética de la economía, se fundamenta en:


  • la producción y el crecimiento continuos.
  • el aumento de las transacciones financieras y la economía especulativa.
  • una sociedad consumista (la del "primer mundo") de bienes superfluos.
  • el neocolonialismo.
Las consecuencias:

  • la contaminación a escala planetaria y el cambio climático.
  • la destrucción de recursos naturales.
  • la pérdida de biodiversidad.
  • la generación de residuos tóxicos y desechos no biodegradables.
  • el aumento de la brecha entre países ricos y pobres.
  • el hambre, la exclusión y la miseria de una buena parte de la humanidad.
  • la inmigración, el desplazamiento de miles de personas al "primer mundo" buscando mejores condiciones de vida.
  • la uniformidad cultural y la pérdida de identidad de los pueblos indígenas.
  • la desaparición de los medios de vida de las sociedades campesinas, por la vulneración de su soberanía alimentaria.
  • el retroceso de la democracia (donde la hay) y de la soberanía de los Estados.
  • el deterioro de las condiciones laborales de millones de trabajadores.
  • el trabajo infantil.
  • la investigación científica con criterios de rentabilidad económica.
  • el aumento de los conflictos bélicos y del terrorismo. Fuertes inversiones en armamento.
Los pronósticos realizados a finales del siglo XVIII y principios del XIX por Adam Smith y otros teóricos del liberalismo económico clásico (cuyos presupuestos básicos siguen en vigor hoy bajo la forma del neoliberalismo), acerca de que el libre mercado, la propiedad privada, la acumulación de capital, el interés individual y la ausencia de intervención estatal en los asuntos económicos, traerían el progreso, el bienestar y la felicidad a toda la humanidad, no se han cumplido, ni se van a cumplir jamás.

Aquí tenéis el cortometraje "La isla de las flores" del cineasta brasileño Jorge Furtado, realizado en 1989. A través de una narración sarcástica y una mirada crítica desvela los mecanismos de la globalización y la sociedad de consumo e invita a la reflexión. Este vídeo puede complementarse con "La Historia de las cosas" dirigido por Louis Fox y con guión de Annie Leonard (EE.UU. 2007), y con la película documental "La pesadilla de Darwin", de Hubert Sauper (Francia, Austria y Bélgica. 2004).



sábado, 13 de febrero de 2010

GEÓGRAFOS MUSULMANES. Al Idrisi y su mapamundi

Mapamundi de al-Idrisi (s. XII) Fuente: Wikipedia

Se ha dicho que la ciencia geográfica fue recuperada en la Europa de los siglos XV al XVII al descubrirse los trabajos de Ptolomeo, y que las Cruzadas y las expediciones ultramarinas hispano portuguesas contribuyeron a este resurgir. Se ha dicho también que los primeros tratados de geografía con base científica fueron realizados por europeos durante esos siglos..., pero la realidad es otra. Durante los siglos VIII al XV, cartógrafos, exploradores y viajeros musulmanes escribieron innumerables libros y tratados sobre la geografía de Europa, África, India y China, superando en mucho a lo que los europeos produjeron en relación con la geografía de esas regiones, incluso hasta el siglo XVIII.

A comienzos del siglo IX, el califa al-Ma'amûm fundó en Bagdad la "Casa de la Sabiduría" (Bait al-Hikmah), un hito en los estudios astronómicos, matemáticos y geográficos. A partir de este momento los estudiosos musulmanes comenzaron a afirmar con insistencia la esfericidad de la tierra, sin que esta circunstancia significara ningún problema teológico para las autoridades religiosas del Islam medieval. Entre las innumerables aportaciones de estos científicos, destacó la del astrónomo Abu-l-Abbas al-Fargani (813-882) quien estableció que la longitud del perímetro terrestre en el ecuador era de unos 40.260 Km., una cifra asombrosamente cercana a su valor correcto de 40.075 Km., lo que sería confirmado más de un siglo después por el matemático y astrónomo al-Biruni (973-1048), que mediante el uso del astrolabio, calculó el radio de la esfera terrestre con un error inferior al 1%. Los tratados astronómicos y matemáticos de los musulmanes, se complementaron con los estudios cartográficos y geográficos, dando como resultado un corpus de conocimiento científico sobre el planeta Tierra y el sistema solar muy avanzado.

AL-IDRISI Y SU MAPAMUNDI.

Entre todos los geógrafos musulmanes, el más destacado es, sin duda, Abu Abdullah Muhammad al-Idirisi. Nacido en Ceuta en 1099 o 1100 y muerto probablemente en Sicilia en 1165, es considerado como el más importante cartógrafo de la Edad Media. Era descendiente de Idris II, rey de la taifa de Málaga, ciudad que tuvo que abandonar su familia rumbo al norte de África cuando el reino de Málaga se incorporó al de Granada. Estudió en Córdoba. Viajó por la península ibérica, norte de África y Oriente. En 1154 confeccionó un mapamundi incluido en un libro titulado con el sugerente nombre de "Pasatiempo de quien está poseído por el deseo de abrir horizontes", también conocido como "El libro de Roger", en honor de Roger II, soberano normando de Sicilia, para quien trabajaba al-Idrisi en aquella época. Este mapa fue reeditado en 1162 en una edición ampliada y una tercera edición resumida vio la luz en 1192.

A pesar de los limitados medios de la época, esta obra constituye sin duda el nacimiento de la cartografía moderna, pues presenta la novedad de ser el primer mapa donde se abandona la tradicional utilización de formas geométricas basadas en los mapas de Ptolomeo e introduce importantes innovaciones cartográficas como la representación de los mares por medio de líneas onduladas, las montañas o relieves mediante perfiles abatidos, y por primera vez se representan ríos y la localización de ciudades. Fue el primero en utilizar datos basados en conocimientos objetivos alejados de convicciones religiosas. Incluye una descripción detallada y fiel de las características naturales, sociales y económicas de las ciudades que aparecen en el mapa.

Puede parecer sorprendente, por tanto, que su obra fuera rechazada o mutilada en el mundo occidental, pero aceptarla hubiera significado admitir sin reservas la esfericidad de la Tierra, el concepto de clima, la utilidad de las coordenadas o la irrelevancia de Jerusalén a efectos cartográficos.

Lo más interesante del mapa es que la orientación norte-sur está invertida en relación a los mapas de los cartógrafos europeos desde el Renacimiento hasta hoy. ¿Eurocentrismo? África aparece "arriba" y Europa "abajo", el norte en el sur y el sur en el norte, como los mapas chinos. La proyección que usamos hoy tiene sus orígenes, cómo no, en Ptolomeo. Durante el Renacimiento y los siglos posteriores los mapas se siguieron confeccionando siguiendo sus descripciones y ningún cartógrafo del mundo cristiano europeo se opuso a la proyección ptolemaica. Una de las causas de la pervivencia y magisterio de Ptolomeo fue que la Iglesia católica adoptó e impuso su modelo astronómico geocéntrico (la Tierra ocupa el centro del Universo y todos los astros, incluido el Sol, giran a su alrededor).

L
os puntos cardinales, como la red de coordenadas geográficas, no existen, carecen de sustentación en la Física o la Astronomía, tienen un carácter de referencia y, por tanto, son totalmente convencionales.

Observad el mapa reproducido arriba, es un buen ejercicio para romper esquemas...

Por cierto, una de las rutas de El legado andalusí (Fundación de la Junta de Andalucía cuyo objetivo es la revalorización y difusión de la civilización hispano-musulmana) es la Ruta de al-Idrisi.